BALANCE AMBIENTAL REGIONAL (1)

Iniciamos el último mes del año y miramos hacia atrás para ver lo transcurrido en la Región del Guarán, la bañada por los ríos Paraná, Uruguay, Paraguay y de la Plata, donde enfocamos nuestra mirada ambiental, para tratar de dilucidar hacia donde vamos.

Comenzando por el norte, en la provincia de Misiones, vemos que el Proyecto Garabí, que contempla la construcción de dos nuevas represas en nuestra frontera con Brasil continúa sin prisa pero sin pausa en su camino de concreción de las dos represas, Garabí y Panambí que vendrán a modificar irreversiblemente la naturaleza y el paisaje.

La resistencia ciudadana hacia este proyecto es unánime, consultas a los habitantes de las ciudades de la región afectada, y  organizaciones ambientalistas de Corrientes y Misiones y legisladores de Proyecto Sur presentaron un amparo contra la construcción de los proyectos de represas a pesar de lo cual la secuencia de licitaciones y procedimientos legales avanza inexorable.

Y también han comenzado las denuncias refrescando la experiencia de Yaciretá que oportunamente fue referida como un monumento a la corrupción.    Tanto los terrenos a inundar como los necesarios para los obradores y viaductos a construir ya están siendo acaparado por funcionarios, muchos de ellos responsables directos de las indemnizaciones que se pagarán.

Por otra parte las previsiones que hicimos sobre las consecuencias que tendría la ampliación de la cota del lago de Yaciretá comienzan a verificarse y merecerá en el futuro una nota especial.

Un poco más al sur, en Corrientes encontramos los casos más flagrantes y emblemáticos de proyectos que se auspician desde el gobierno y que apuntan a mercantilizar la naturaleza y destruirla.

El malhadado Proyecto Ayuí ha entrado en un impase por  la resolución de la Secretaría de Ambiente de la Nación que no lo autoriza, pero sus promotores, especialmente en el gobierno correntino estudian por estos días como relanzarlo, aún en la ilegalidad.

Mientras tanto, el magnate húngaro George Soros, ha tomado posesión de miles de hectáreas en el norte de la provincia, sobre la ruta 12, donde esta construyendo enormes canalizaciones y obras de infraestructura que afectan las nacientes de los humedales regionales con la anómica complicidad del ICAA, Instituto del Agua de Corrientes que autoriza por acción u omisión estas intervenciones en la geografía regional que producirán afectaciones significativas sobre los acuíferos de la provincia.

Mientras tanto, Colombi, a través de su Ministro Jorge Vara, expresidente de la asociación de plantadores de arroz de la provincia, anuncia la inminente concreción de una pastera en la localidad de Ituzaingó, sobre el río Paraná.

Sus proyectos sobre el río Uruguay debieron ser abandonados por la enorme movilización de las ciudades localizadas a la vera del Uruguay, pero el sabe que sobre el río Paraná, la ciudadanía todavía no ha entrado masivamente en alerta por el significado que tendrán estas industrias sobre los acuíferos provinciales.

Las intenciones de Colombi quedan claramente reveladas por su maquiavélica dialéctica cuando rechaza la donación de las tierras de Thompkins en el Iberá para hacer una reserva acusándolo de “extranjero”  azuzando un chauvinismo mediático ramplón, pero omite calificar del mismo modo a las enormes inversoras forestales chilenas que cuadruplican las posesiones del magnate norteamericano y que ya controlan cerca del 5% de las tierras de la provincia y han instalado sobre ellas centenares de miles de hectáreas de monocultivos forestales que las han modificado irremediablemente para mal y que han provocado un éxodo masivo de sus otrora pobladores a los cordones de miseria de las ciudades de la provincia, aumentando la marginalidad y todos los flagelos sociales en Corrientes,  que posee los records nacionales en estos registros, en un fenómeno que los especialistas denuncian como el “Desierto Verde”.

Corrientes es la provincia más afectada de nuestra región por los proyectos que destruyen el ambiente en connivencia con una corrupción política que los facilita y auspicia.

Nuestro espacio se acaba, así que continuaremos en nuestra próxima entrega con el balance de nuestra provincia: Entre Ríos, donde hay mucho que analizar y comentar.

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un comentario

  1. Todo los balances anuales darán mal a la salud de la poblacion, mientras los balances de los que estan en el «negocio» les dá espectacular?¿hasta cuando?

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